jueves, 7 de agosto de 2008

Despachar tras ser despachado, la realidad de “Forgetting Sarah Marshall”

Definitivamente el mundo alrededor de Judd Apatow está redefiniendo la comedia, en especial la comedia romántica. Y aunque Apatow es solo productor de esta entrega, su influencia se puede ver en todo lo que ella tiene que brindar.

¿Qué hacen de estas comedias del universo Apatow tan excitantes? Simple, su acercamiento a la realidad. Tal como lo describió un cinéfilo en su blog, es la cercanía a las situaciones reales lo que le da la vivacidad a estas cómicas entregas. Un adulto de 40 años siendo virgen todavía, una pareja de jóvenes que quedan embarazador por una noche descontrolada, son situaciones reales con las cuales podemos gozar o sufrir.

En “Forgetting Sarah Marshall” la historia de Jason Segel, dirigida por Nicholas Stoller usa a una famosa como ex con el simple hecho de usar la metáfora de que cuando uno sufre una ruptura ve a esa persona en todos los lugares.

Jason Segel como Peter Bretter en una escena de la película

Peter Breter es en primera instancia la víctima de la ruptura, su novia Sarah Marshall, una exitosa actriz para un programa de televisión (del cual Bretter es compositor de la música) decide terminar la relación con Peter, algo que lo deja devastado.

Para lidiar con la ruptura, un completamente devastado Peter (un personaje personificado por el mismo Jason Segel y con el que cualquier hombre se puede identificar) viaja a Hawai para tratar de olvidar a Sarah, pero su mala suerte lo lleva directamente al hotel en donde ella y su nuevo novio han decidido pasar unas vacaciones.

Stoller y Segel se burlan de las situaciones abruptas que uno sufre cuando pasa por una ruptura dolorosa. Las canciones, las imágenes, los recuerdos todo es utilizado a favor de la audiencia y en contra de Bretter, un personaje que con sus lloriqueos revela los momentos más íntimos y ocultos del sexo masculino.

Fuera de que la historia sea una comedia y que los momentos están destinados precisamente a buscar la risa no quitan que parten de situaciones reales. El hastío de una mujer por la rutina de un hombre, el sentir de ese hombre al ser rechazado por la mujer que ama cuando cree que ha dado todo de si y el rencor de verla con otro hombre son situaciones muy reales en nuestra vida cotidiana.

No cabe duda que Sarah Marshall se convertirá junto a las dos previas (40 year old virgin, Knocked up) dirigidas por Apatow en comedias románticas relevantes del nuevo siglo, si es que ya no lo son.

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